Washington, 17 sep (Prensa Latina) Calcular la temperatura promedio a la mitad de la troposfera, capa más baja de la atmósfera terrestre, sobre el golfo de México podría anticipar cuántas tormentas atravesarían esa zona, reveló un estudio hoy.
Publicada en la revista Geophysical Research Letters, la indagación a cargo de expertos de la Universidad Estatal de Louisiana de Estados Unidos, demostró una correlación entre la temperatura aproximadamente a la mitad de la troposfera y el número posible de huracanes.
Esa área de 500 milibares se desplaza hacia arriba o hacia abajo dependiendo de lo cálida que sea la atmósfera y está aproximadamente a unos seis kilómetros sobre la superficie.
Los especialistas utilizaron datos recopilados entre 1979 y 2010, así como otros modelos ejecutados en el mes de mayo, para desarrollar la nueva propuesta que puede anticipar con precisión el número de tormentas probables en el Golfo de junio a noviembre.
Al respecto, Corene Matyas, profesor de geografía de la Universidad de Florida, también del país norteamericano, y que no participó en este estudio, calificó de fantástica la iniciativa.
«En esencia, crearon una métrica bastante simple para tratar de predecir los huracanes del golfo de México. La mayoría de los modelos solo intentan hacerlo con los sistemas de tormentas del Atlántico en su conjunto, por lo que es importante observar una subregión pues las condiciones podrían ser diferentes», resaltó.
Por su parte, Paul Miller, profesor asistente de oceanografía y ciencias costeras en la Universidad Estatal de Louisiana, y autor principal del estudio, señaló que los gobiernos pueden usar este modelo para preparar mejor los recursos con el objetivo de mitigar desastres ante el paso de huracanes.
«Es útil también para las industrias de operaciones de petróleo y gas en alta mar. Sentíamos que esto era algo realmente importante», aseveró Miller.
Subrayó que el golfo de México es una subcuenca muy activa del Atlántico. Solo en 2020 por el territorio de Louisiana pasaron cinco tormentas con nombre.
«Es más probable que las tormentas se formen antes en la temporada de huracanes en el golfo que en el Atlántico. En momentos de temperaturas máximas en la superficie del océano desde agosto hasta octubre, los sistemas de tormentas nacen dentro allí y pueden utilizar la energía disponible para intensificarse rápidamente», explicó.
Además, dijo, debido a que el golfo está casi completamente cerrado, esos fenómenos generalmente involucran algún tipo de impacto terrestre.